Llevar un GR86 a la pista, debería ser posible. Sin embargo, un propietario no recibe una garantía después de que su motor se metió en la sopa en la pista.
No todos los Toyota están en su elemento en la pista, pero el GR86 sin duda lo está. Es un coche excelente para divertirse en el Nordschleife. En su presentación, Toyota invitó a los periodistas a una sesión en pista por una razón.
Así que cuando llevas un Toyota GR86 a la pista, no haces cosas para las que el coche no está hecho. Por eso resulta especialmente amargo que se deniegue la garantía a un propietario estadounidense de un GR86 cuyo motor se rompió en la pista. Según Toyota, supuestamente «utilizó mal» el coche.
Sin embargo, hay imágenes a bordo del incidente y el maltrato del coche no es demasiado grave. El padrino condujo pulcramente por el Palmer Motorsports Park, sin hacer ninguna locura. Al fin y al cabo, no dejaban de ser sus vueltas de calentamiento.
Sin embargo, en algún momento empezaron a sonar ruidos extraños y, finalmente, salió humo de debajo del capó. El propietario siguió conduciendo un buen rato después de que empezaran los ruidos laterales. Quizá no debería haberlo hecho, pero pensó que los ruidos procedían de un paso de rueda y no del motor.
Puedes ver las imágenes a continuación, los problemas empiezan aproximadamente a partir del minuto 6:
El coche era aún bastante nuevo, con unos 30.000 km en el cuentakilómetros. A pesar de ello, se denegó la garantía y el propietario tiene que pagar unos 12.000 euros de su bolsillo. Aún no lo ha hecho, ya que está considerando la posibilidad de acudir a los tribunales.
No se sabe exactamente cuál fue el problema, pero puede haber sido un problema de RTV. RTV es un sellador que puede terminar en el aceite del motor y, en el peor de los casos, hacer que el motor se vuelva loco. Esto es algo que obviamente debería estar cubierto por la garantía, pero si esto sucede en la pista, no tienes suerte.
No es la primera vez que ocurre algo así. De hecho, el año pasado, a un propietario de un GR86 también se le denegó la garantía después de que su motor se estropeara. La razón: había compartido fotos que mostraban que había utilizado el coche en un trackday.
Después de que compartiera esta historia en las redes sociales, Toyota acabó arreglando las cosas en garantía. Por lo tanto, todavía puede haber esperanza para este desafortunado propietario de un Toyota GR86.
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